Acelerar empresas... ¿pero eso qué es?

Como muchos sabreis, nuestra empresa, Bravo Consultores de Negocio, junto con otras consultoras sevillanas, ha ganado recientemente un concurso público para gestionar la denominada "Aceleradora de Empresas" del Ayuntamiento de Sevilla. Y eso ha llevado a muchos a preguntarnos (y con razón), que qué es eso de la aceleración de empresas: ¿se trata de una nueva moda?, ¿un "palabro" más de consultores para al final acabar haciendo lo de siempre? ¿si mi empresa está arrancando y tengo que ir poquito a poco, encima me voy a poner ahora a acelerar? Por eso voy a dedicar unas líneas a intentar contaros de qué va esto.

Lo primero que hay que tener claro es que cuando hablamos de "acelerar una empresa", vamos a hablar de NEGOCIO. O sea, de cómo la empresa genera valor. O sea, de cómo ganar dinero. Si no hay negocio, no hay aceleración que valga. Y para ganar dinero, tenemos que ofrecer algo a nuestros clientes que éstos valoren, que estén dispuestos a pagar por ello y qu lo que estén dispuestos a para por ello a mi me compense.

Esto es muy fácil decirlo, pero lo complicado es llevarlo de manera efectiva a la práctica. La mayoría de las veces las empresas (y sobre todo las PYMES) lo hacen mediante el método de "prueba-error", pero eso suele llevar mucho tiempo, casi siempre nos cuesta el dinero y, en muchos casos, supone la "muerte" de la empresa, que cuando por fin sabe lo que de verdad necesitaba (y estaba dispuesto a comprar) a su cliente, ya no tiene recursos financieros para ponerlo en marcha. Pues de eso va la aceleración de empresas, de intentar, mediante distintas técnicas y con la ayuda de un experto, de validar estas necesidades del cliente, mejorar mi producto para ajustarlo a las mismas y hacerlo rentable, pero de manera rápida y efectiva (para que cuando de con la tecla, aun esté a tiempo de rentabilizarlo). Podríamos decir que se trata de "cocinar" las ideas en un microondas, en lugar de hacerlas a fuego lento. Y si el "plato" sale mal, repetirlo para mejorarlo, hasta que demos con la receta ideal.

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