Por el titulo de este Post quizas alguno piense que hoy voy a hacer un comentario sobre la obra de Aristóteles. Pero me temo que no van por ahi los tiros, sino que es una mera excusa para hablar del "espectáculo" que he tenido que presenciar las últimas semanas al hilo de uno de nuestros proyectos. No voy a entrar a dar muchos detalles sobre el asunto en sí (aunque muchos por el título ya os estaréis imaginando por donde van los tiros), sino sobre lo que, por desgracia, una vez más he podido constatar. Y es la crisis de valores éticos y morales en la que vive nuestra sociedad y que se traslada, de manera inevitable, al mundo empresarial. Esa crisis se traduce en un querer ganar a toda costa, en un querer intentar conseguir todas las cosas que uno quiere sin levantar la vista y mirar alrededor, en una permanente búsqueda de cómo poder saltarme las reglas pero sin que formalmente me las salte. De ahí que hable de ética y no de legalidad.
El concepto de la ética ha prácticamemte desaparecido de nuestra sociedad y nos hemos instalado en un peligroso "ius positivismo" (frente al "ius naturalismo"), donde lo que no está prohibido, está permitido, y donde el único límite es el que marca la ley. Se puede mentir, engañar, abusar de una posicion predominante o de un conocimiento que el otro no tiene... todo vale mientras la ley lo permita (o, aun peor, mientras quien tiene que hacer cumplir la ley no lo detecte). Ya dijo Leopoldo Abadía que esta crisis era una crisis de decencia, y me temo que lo que está pasando es que en lugar de provocar una catarsis se está acentuando lo peor de nuestros defectos. Pero, cuidado, porque esto es peligroso y tarde o temprano se vuelve contra los mismos que lo defienden. Los enemigos del ius positivismo suelen recordar que el Partido Nazi accedió al poder de manera legal, cumpliendo siempre la Ley: ganó unas elecciones, consiguió que el Parlamento de democráticamente le diera plenos poderes al Fuhrer, éste empezó a promulgar leyes (todo legal hasta ahora) y a partir de ahí ya conocemos la historia.... No digo que esto vaya a pasar en España, ojo, pero creo que es sano que empecemos a ver el lado ético y moral de las cosas y empecemos a exigir no solo el cumplimiento de la ley sino un comportamiento ético en los negocios.
El concepto de la ética ha prácticamemte desaparecido de nuestra sociedad y nos hemos instalado en un peligroso "ius positivismo" (frente al "ius naturalismo"), donde lo que no está prohibido, está permitido, y donde el único límite es el que marca la ley. Se puede mentir, engañar, abusar de una posicion predominante o de un conocimiento que el otro no tiene... todo vale mientras la ley lo permita (o, aun peor, mientras quien tiene que hacer cumplir la ley no lo detecte). Ya dijo Leopoldo Abadía que esta crisis era una crisis de decencia, y me temo que lo que está pasando es que en lugar de provocar una catarsis se está acentuando lo peor de nuestros defectos. Pero, cuidado, porque esto es peligroso y tarde o temprano se vuelve contra los mismos que lo defienden. Los enemigos del ius positivismo suelen recordar que el Partido Nazi accedió al poder de manera legal, cumpliendo siempre la Ley: ganó unas elecciones, consiguió que el Parlamento de democráticamente le diera plenos poderes al Fuhrer, éste empezó a promulgar leyes (todo legal hasta ahora) y a partir de ahí ya conocemos la historia.... No digo que esto vaya a pasar en España, ojo, pero creo que es sano que empecemos a ver el lado ético y moral de las cosas y empecemos a exigir no solo el cumplimiento de la ley sino un comportamiento ético en los negocios.
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